martes, 31 de enero de 2017

Como Si Tuviera Dieciseis

Pov. Iván 
Semestre 5. Universidad.

Hace ya unos cuantos días desde que llegué a quedarme a vivir con Marco y ya creamos nuestra rutina de todos los días. Nos levantábamos muy tarde, íbamos a comprar cosas para la comida/cena y nos sentábamos juntos, y un día que terminamos de comer quise platicar con él de cosas "serias", y sin dejar de ver el lavabo que estaba goteando un poco, me levanté, recogí su plato y hablé.
- ¿Hoy tienes clases?
-Sí.
-Y... ¿no piensas ir o qué?
-Nah.
Vaya, si hubiera sido yo el que le dijera eso me estaría corriendo de la casa a que fuera a mis clases. Aunque bueno, es sábado, no lo culpo que no le dé la gana de ir. Pero todo iba bien, hasta eso. Aún no me regañaba por haber (literalmente) huido de la casa de mis padres, porque no le he dicho nada por supuesto.
-Iván.
- ¿Mm?
Y luego lo arruinó.
- ¿Cómo demonios llegaste hasta acá? Es jodidamente increíble que me hayas encontrado y que estés aquí... ¿Acaso tus padres saben algo de ti? ¿Te fugaste? ¿Te volviste más pendejo de lo que eras?
Se sentó en el sillón donde nomás él cabe, me voltea a ver y se rasca la cabeza.
-Jajajaja, sí Marco, pero eso ya lo sabíamos... igual, no es como si alguien fuera a preocuparse por eso.
Suspiré, me senté arriba de él y lo veo con ojos entrecerrados.
-Ni siquiera el pendejo con el que compartía MI cuarto sabe.
Agh, Francis. Él era mi roomie, un mastodonte idiota que tenía una beca por jugar football americano y había sido transferido a MI cuarto por que estaba más cerca de sus clases. Siempre llegaba a hacer su desmadre en MI habitación, me golpeaba, me molestaba y, en ciertas ocasiones, me tocaba. Recuerdo sus sucias manos sobre mí, su estúpida fuerza bruta, su asquerosa boca en mi cuello, mis forcejeos y la satisfacción de verlo tirado en el piso de dolor por patearlo con toda mi fuerza y enojo. Hablar con algún maestro acerca de estas situaciones tampoco era buena idea.
Varios de ellos sabían que yo haría cualquier cosa por pasar alguna de sus materias. Desafortunadamente mi procrastinación causó que varias veces sucumbiera a lujuria de mis profesores para conseguir una calificación excelente en su clase. En las oficinas se las chupaba a mis profesores y me cogía a mis maestras. Nada serio, no sentía absolutamente nada cuando lo hacía, los veía con indiferencia y desdén. Ni ellos ni yo íbamos a revelar nuestro sucio secretito. Era un cabrón. Un pendejo sin remedio.
Además de que jamás dije nada al respecto acerca de mi roomie por que sí me daba miedo que uno de esos días mis golpes ya no me resultaran útiles para escapar de su agarre o que me fuera a chantajear con mi novia (en ese entonces).
- ¿Y le avisaste?
-Eh... algo así. Le dejé una carta.
"Daniel, eres un idiota, púdrete. Me largo a otro lado."
-Vaya, qué elegante.
-Obvio microbio. Oye... creo que es hora de que recoja mis cosas.
Me levanté del sillón y me dirigí a la maleta donde estaban mis cosas, saqué un chicle de mi chamarra y comencé a pegar unos pósters de My Chemical Romance con cinta adhesiva. Marco sólo se limitó a rodar los ojos mientras me reía, le di la espalda y pegué pedacitos de cinta en los párpados para que mis ojos quedaran de más abiertos. Giré de repente y saqué la lengua mientras volteaba los ojos.
-JAJAJAJAJAJAJA ¡QUÉ PEDO CONTIGO!
Me encanta hacerlo reír con mis estupideces.
-Qui pidi contigi...
Me quité los pedacitos de cinta de mis ojos y seguí pegando, terminado seguí sacando cosas del resto de mis maletas, saqué mis camisas, playeras, pantalones y ah... una foto de mi madre conmigo. Pero no iba a enseñársela a Marco porque él probablemente-
-¡¿Ese niño lindo eres TÚ?!
Ugh.
-Sí, wey.
-Jajajajaja mírate por Dios, eras una bolita de carne y hueso. Estabas gordibueno.
-Como probablemente cualquier niño sano.
-Al rato te vas a poner igual que en la foto.
Se fue y se echó en la cama a jugar o lo que sea con su celular. Mientras yo había terminado de acomodar todas mis cosas y esconder mis maletas debajo de su cama, me arrodillo para verlo.
-Hey.
- ¿Qué?
- ¿Me darás un tour por aquí?
- ¿Qué quieres hacer?
-Vamos al cine.
-Hmm... Está bien, hay un cine aquí cerca como a cinco minutos caminando.
-Perfecto, voy a bañarme.
Me reí y empecé a esculcar en el clóset de Marco, quería usar algo de él porque sé que le caga que agarre sus cosas, pero adivinen qué, me vale verga lol. Y entonces vi que tenía colgada hasta atrás la playera que usábamos de uniforme en la preparatoria, sentí como mi pecho se contraía y me daba escalofríos en la espalda por tantas cosas que hicimos en ese corto tiempo... La tomé, le hice ojitos y se la mostré. Marco se sorprendió y se puso rojo como tomate.
-Ay. Nooooooooooo. ¿Es enserio, corazón? JAJAJA ¿por qué tienes esta cosa vieja todavía?
-Ay sí ¿Qué querías? ¿Que la quemara o qué?
Frunció el ceño y volteó a otro lado, hizo como un mini puchero, parecía niño chiquito. Pero lo entendía, había tantos recuerdos impregnados en esa playera que no lo culpaba que reaccionara de esa forma, nomás quería hacerlo enojar.
-Ya pues, jajaja, sorry, sorry... Tomaré esto, por otro lado.
Agarré un suéter negro y una camisa de vestir blanca, unos pantalones de mezclilla y mis bóxers verdes. En cuanto se dio cuenta Marco, me metí al baño corriendo mientras él me perseguía y... me pegué.
-¡¡FUUUCKKKKK!!
Pinche departamentillo. Me pegué con el pinche lavabo de cerámica en la rodilla cuando quise entrar corriendo. No mames Marco, ¿no pudiste encontrar un cuarto más chico o qué? Escuché sus carcajadas al otro lado de la puerta, hasta se me salió la lagrimita del coraje. Pero me aguanto como macho (loool), me quité la ropa y anduve averiguando un poco de cuál era la llave del agua caliente, pero con mi inteligencia superior le atiné.
Ya me urgía sentir el agua hirviendo en mi espalda, bueno eso y la sensación de limpieza.
- ¡Nomás no tardes mucho, la presión del agua no es la mejor aquí!
-Sí, sí, sí cuiden el agua, niños. Marco el vegetariano hipster ha hablado.
Tomé el shampoo y ah... ese aroma. El cabello de Marco huele tan bien. Realmente estaba disfrutando demasiado este baño. Salí ya cambiado (porque yo me cambio literal saliendo de bañarme), y Marco de la nada había transformado el departamento completamente diferente a como lo había visto siempre.
-No mames ¿dónde estoy? Juraría que hace diez minutos estaba en el desmadre que Marco llama "casa".
-Ja, ja, ja. Muy gracioso, Iván.
Le saqué la lengua mientras él rodaba los ojos.
-¿Tú ya estás listo o te vas a ir en esas fachas?
Traía su playera favorita de The 1975, un suéter gris de esos que parecen de abuelo y un pantalón de mezclilla beige, era obvio que no estaba en fachas, pero él sabe que me gusta hacerle burla.
-Cállate, ya vámonos.
Tomamos nuestras chamarras y salimos del departamento. A veces cuando vamos caminando por la calle Marco me quiere tomar de la mano. Me caga, aún no estoy acostumbrado a andar de maricón en público. Todavía me da quién sabe qué cuando lo hace y claro que mi primera reacción es alejarme de él, como solía hacerlo en la preparatoria. Es... difícil tratar de cambiar un comportamiento que desde siempre se te ha inculcado.
-Ya wey.
Y ahí va otra vez de pendejo. Se ríe el idiota.
-No mames, pastelito, no hay gente por aquí.
"Pastelito". Me ULTRA ARCHI MEGA RECONTRA CAGA que me diga así. Solía decirme así en la preparatoria tiempo después de que salíamos en secreto por que hubo un tiempo en que vendía unos pastelitos que estaban muy buenos. Y cuando me sobraban a veces él y yo nos los comíamos en la cafetería donde él trabajaba. Me volteo y le doy un buen golpe en el hombro.
-Deja de estar jodiendo.
Pero bueno, es cierto, no hay ni un alma por aquí, de hecho, se ve demasiado desértico para ser las 7 de la noche. Se soba el hombro y me abraza. Aparto la mirada y siento como me pongo rojo poco a poco, esta vez no lo aparté de mí, sino que simplemente lo dejé tomarme entre sus brazos.
-Tranquilo…
Alcé poco a poco con nerviosismo mis brazos y le correspondí el abrazo. Me sentí tan seguro y por un breve instante me volví a sentir como ese chico de dieciséis que se había enamorado por primera vez. Hasta que escuché pasos y risas de niños que se acercaban y deshice mi agarre rápidamente. Marco sólo se limitó a sonreír y seguimos caminando hasta el cine.

viernes, 27 de enero de 2017

"Three is trouble" (MultiPov) / Volviendo al dormitorio

Multi Pov.
Semestre 5. Universidad.


Iván:
HA. ¿Quién te crees para verme de esa forma, mequetrefe? Eres sólo un amigo de Marco, ¿entonces por qué le muestras tanto interés? De nomás recordarlo me daban tantas ganas de romperle la cara. Y Marco tampoco ayudaba, sólo hacía que sintiera estos estúpidos celos. Y claro, mi reacción natural es ponerme a la defensiva y ofenderlo a todo lo que da. 

-¿Qué me ves?
-Nada.

Me caga. Me molesta la idea de que Marco estuviera hablando con él. Y peor eso de que son "mejores amigos". Mejores amigos, mis bolas.


Jack:
"¡Vaya con su actitud!", pensé en mi cabeza mientras entraban al dormitorio. Me limité a ignorarlo y mencionarle a Marco que la comida de aquel patán aún no llegaba. ¡Bah, ¡Hasta gusto me dio que el tipazo se vaya a quedar sin comida! Tenía en mi cabeza un sinfín de groserías y comentarios en forma de mofa para él. Pero, intenté mantenerme al margen. 

- Bueno, podemos empezar a comer ya que han traído las bebidas -Puse una sonrisa burlona y abrí mi bebida para tomarla sin decir más. 

Creo que mantenerme al "margen" no me está funcionando muy bien.


Marco:
Eran unas niñas… me sorprendía de Jack, él siempre es amable, nunca lo había visto así.

I: ¿Y la comida?
(Jack solo sube los hombros, diciendo que no sabe... de manera un tanto burlona)
Yo sólo bebo e intento ignorarlos…
I: ¿Crees que es gracioso?
J: No sé a qué te refieres.

Veo a Iván... Sé que se está enojando demasiado, cuando veo que se le acerca a Jack le digo que no importa, que inicien a cenar ellos dos, y que yo espero a que llegue la comida, sumado a eso le lanzo una mirada de advertencia a ivan, que le pare a su pedo… el solo me mira como diciendo que porque le advierto a él y no a Jack. Iván se sienta a comer de mala gana.

J: ¿Cenas con café?
I: ¿Qué te importa?
M: Jack trabaja en una cafetería (digo intentando estúpidamente de sacar conversación)
I: …. Igual que tú… yupi ( Irónico... Odio cuando inicia con eso. )

Me siento al lado de Iván y le robo algo de comida con la mano, me mira molesto, yo sólo le sonrío… intento alivianar las cosas… pero el ambiente es una mierda.
Jack ve que le quito comida a Iván y me ofrece de su plato.

I: Si quisiera comerse algo tuyo, ya te lo hubiera hecho saber. ( Joder con este hombre... Jack sólo lo mira molesto pero no le contesta)
M: Iván… (Le digo molesto)
I: Marco… ( Me contesta en el mismo tono … quiero contestarle "Polo" como siempre lo hacemos jugando… pero no parece divertido en este momento, entonces suena la puerta y voy por la comida).


Iván:
-¡Yo voy!

Marco se levantó rápidamente de la mesa y fue a pagar la comida. Mientras él estaba apurado trantando de sacar el dinero yo volteé a ver al parásito que estaba al otro lado de la mesa. Por Dios, era tan odioso que simplemente no pude evitarlo, le tuve que hacer caras. Le saqué la lengua y le volteaba los ojos en silencio mientras Marco discutía con el repartidor por que no traía cambio ni un billete más chico. El tipo me veía con cara de ofendido y empezó a hacerme ademanes y caras también en silencio. Marco por fin había terminado de pagarle y en cuando se volteó ambos dejamos de hacernos caras.

-Por fin podremos comer todos. Tengo bastante hambre jajaja, ¿y qué tal ustedes?
-A mí ya se me quitó. Mi comida se puso fría en lo que te esperaba.

Dejé caer el tenedor en la mesa y me crucé de brazos. Y luego el imbécil habla murmurando, todo pendejo.

-Ay, no jodas.

"Ay, no jodas" ¿Es enserio? ¿ENSERIO? me levanté de la pinche mesa y le pegué con ambos puños cerrados.

-¿¡Que no joda?! ¡Tú eres el que está a chingue y chingue! ¿¡Por qué carajo tenías que aparecer en la puerta todo pendejo?!

Y no me esperaba que él también se parara de la mesa y mucho menos que se atreviera a contestarme.

-¡Yo no soy ningún pendejo! ¡No sé cuál es tu problema conmigo pero adivina qué, no me importa!

Se paró enseguida de Marco y lo tomó del brazo.

-Marco y yo somos mejores amigos.

Oh no. No. NO. En este punto ya ni siquiera estaba pensando. Simplemente mi cuerpo reaccionó antes de que le dijera algo, mi puño fue directamente a su cara.


Jack:
El imbécil había tomado coraje para comenzar a discutir. Me levanté también y le respondí tratando de comprender qué carajos le sucedía. Aunque, a decir verdad, comprendía un poco su molestia. Su simple y jodida parecencia también me frustraba. Tomé del brazo a Marco y le di una mirada retadora.

-Marco y yo somos mejores amigos. 

Él estaba furioso y Marco parecía nervioso. Yo simplemente me quedé ahí estático, casi listo para recibir un golpe y comenzar lo que sería una pelea absurda.  Y entonces avanzó y me dio un buen puñetazo en la cara. Mi cabeza se inclinó ligeramente pero volví a mi posición para regresarle el honor. Cerré mi puño y le di justo en el estómago para sofocarlo. Es curioso porque siempre he sido una persona bastante tranquila pero, cuando se trata de Marco... Algo no es coherente dentro de mí y ahora con este idiota tirando golpes a lo pendejo, no podía ser yo como soy normalmente. Las cosas se ponían terribles y simplemente no podía dejar de responder los golpes. Estaba enfurecido, NO SABÍA NI QUIÉN CARAJOS ERA Y, ¡YA NOS ESTÁBAMOS PUTEANDO!

- ¿QUÉ TE PASA IDIOTA?, ¿QUÉ CARAJOS QUIERES?, ¿ACASO ERES EL IMBÉCIL QUE DEJÓ HERIDO A MARCO?, ¿EH?, ¿Y AHORA VIENES CÓMO PENDEJO A ROGARLE?

Yo estaba gritando....Estaba alterado. No sabía qué estaba haciendo ni qué estaba diciendo. Oh Dios... Creo que es la primera vez que Marco me ve de esta forma. Algo en mí quería detenerse pero, no podía hacerlo... Ya no, no podía retroceder.



Marco:
Aún tenía la bolsa de comida en la mano, cuando Jack estaba al lado de mí, y luego de un momento a otro se estaban dando de putazos frente a mí...  En mi mente estaríamos cenando, quizá arreglando las cosas, ellos se darían cuenta que tienen cosas en común y podríamos llevarnos bien. No, ya saben… estar tirando todas las cosas de la sala en medio de una pelea. Jack le empezó a gritar cosas, nunca lo había visto así… era como una persona diferente, y bueno también estaba Iván... "Ese" Iván que me cagaba, que era hiriente e irónico en todo lo que decía, el que decía las cosas que menos querías oír en la cara y luego se reía... Enserio odio esta parte de Iván. ¿En qué puto momento terminé metido en esta mierda...?

M: NO JODAN, ¡¿QUÉ DEMONIOS CREEN QUÉ HACEN?!

Intentar separarlos fue lo primero que intenté, no funcionó. Decirles que pararan claramente tampoco, es como si no me escucharan... Se gritaban más cosas estúpidas…

"Tú eres el pendejo que lastimó a Marco ¿¡verdad?!", "¡Sólo eras un remplazo, eres patético!"

Creo que había tenido suficiente, ambos son unos pendejos, que se maten si quieren. Tomé mi chamarra que estaba en el respaldo de una silla, la bolsa de comida y me fui. Son unos estúpidos, Iván por estar de celoso o lo que sea, y Jack por seguirle el rollo. Saqué la media cajetilla de cigarrillos que traía en la chamarra y prendo uno... son unos pendejos, esta pudo haber sido una cena normal como amigos si le hubieran parado a sus mamadas, si no le hubiera tomado la palabra y hubiera cenado sólo con Jack ahora estaríamos riendo de alguna estupidez, o si Jack nunca hubiera ido al dormitorio, probablemente estaría cogiendo con Iván en este momento... Pero no, voy caminando en rumbo contrario al campus, realmente no se bien a donde voy, paso el parque que esta por el eco-mart, también el viejo cinema, y varias cuadras de departamentos, hasta que llego a otro parque o algo así, es sólo como un área verde sin bancas ni juegos, no hay mucha gente, sólo unos chicos de preparatoria con un telescopio, pendejos. Está nublado, no van a ver ninguna pinche estrella.
Me siento a comer en el pasto, intento no pensar en que dos personas se están partiendo la madre en mi sala, ni que debí quedarme a separarlos, tampoco quiero pensar en que Iván es el responsable… Intento que me valga madre el hecho de que probablemente mis "vecinos" llamen al encargado, o a la policía y lo consigo, pensaré qué hacer con eso luego. Termino de comer, quiero saber qué hora es pero me doy cuenta que olvidé el celular… Espero que nadie se lo haya arrojado a nadie… Debe ser tarde pues ya no hay nadie en el parque, ahora debo volver y hacer el recuento de los daños... Pero no quiero, fumaré los tres cigarros que quedan en la cajetilla y luego iré a los dormitorios.

Continuará.....